Buenos días Cristina.
Como bien indicas la ingesta de carne cruda o poco cocinada es una de las vías de riesgo para el contagio del toxoplasma gondii.
La carne algo sangrante en su zona central yo la consideraría poco hecha (pero sin duda es un parámetro muy subjetivo). Para estar plenamente tranquila cocina bien la carne o congélala a -20ºC durante 48 horas antes de su consumo.
Es cierto que el riesgo de trasmisión vertical (materno-fetal) del toxoplasma se incrementa con el trascurrir de la gestación, pero también es cierto que el riesgo de alteración grave fetal en caso de contagio se reduce cuanto más avanza la gestación. Es decir, la posibilidad de contagio se incrementa y el riesgo fetal se reduce con la evolución del embarazo.
A mi criterio no es necesario que le comentes nada a tu ginecólogo/a, él/ella ya tiene en mente estos parámetros y los evalúa en función de tu clínica (síntomas), pruebas complementarias, etc. Si fuera necesario realizar algún control, sin duda lo haría sin ninguna indicación por tu parte.
Atentamente
